¿Cedes ante la tentación?


Que nadie, al ser tentado, diga: «Es Dios quien me tienta». Porque Dios no puede ser tentado por el mal, ni tampoco tienta él a nadie. Todo lo contrario, cada uno es tentado cuando sus propios malos deseos lo arrastran y seducen.
Santiago 1:13‭-‬14 NVI

La tentación es el deseo de hacer el mal, algo que sabemos que es incorrecto, que daña a alguien o algo, que ofende a Dios. Allí está operando el enemigo, aquella semilla contaminada que hemos dejado que sea sembrada en nosotros, entonces se vuelve en contra tentándonos a caer, haciéndonos esclavos. Pues lo que viene de Dios nunca nos da esclavitud sino libertad, lo que viene de Dios nos fortalece y promueve, más lo que viene del enemigo nos esclaviza y avergüenza.

¿Cedes ante la tentación? 

Padre celestial, hoy te pido que reveles mis debilidades y toda semilla contaminada, para que sea arrancada de mí. Dame fortaleza para no caer en tentación, dame discernimiento para identificar claramente el camino del bien y del mal, y sabiduría para escoger el bien, obrando siempre conforme a Tu voluntad. En el nombre de mi Señor Jesús, amén.

#UnInstanteconDios

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